El arte de las palabras

Siempre quise ser alta, para poder llegar a la luna, pero no lo fuí. Siempre quise ser esbelta, para lucir un vestido, pero no lo fuí. Siempre quise ser amable, para que todo el mundo me quisiera, pero no lo fuí. Siempre quise dar amor, para ser correspondida, pero no lo fuí. Siempre quise tener alas, y viajar hasta el firmamento, pero no las tuve. Siempre quise tener una hermosa sonrisa, para dar felicidad, pero no la tuve. Siempre quise, siempre quise, y el caso amigo, es que no fuí, no tuve y no recibí muchas cosas, pero, nunca pensé en ser feliz, y sin embargo lo fuí, nunca pensé en cumplir mis sueños, y uno a uno los cumplí, nunca pensé en abrazarte de nuevo, y volví a tenerte conmigo... Fueron tantas cosas las que quise y no tuve, pero tantas otras que no pensé y me llegaron, que a veces me pregunto, porque pasamos nuestra vida, deseando tener cosas, cuando las más importantes llegan solas y nos agarran de la mano. He conocido a muchas personas en mi vida, unas dejaron el cami...

Reinald e Isobair intentaron mantener al margen el tema de Uwuain, no querían decirla que aún no habían localizado a su hermano y que probablemente hubiera muerto en la batalla, además, se habían enterado de que su esposo también había desaparecido, y no parecía haber señales de él en aquel lugar. Comieron y bebieron jugo para recuperar las fuerzas, desde que recibieran el comunicado habían cabalgado tres días sin a penas descanso para llegar cuanto antes al pueblo. -                             Vas a tener que contarnos toda la historia- la dijo Isobair después de meterse otro trozo de pan con queso a la boca- quiero saber quien te saco de casa. -                             Lo haremos después, estoy segura de que estar...