Isemay 40.5
Isemay se levantó con un fuerte dolor de cabeza y oyó a su hijo moverse a su lado en la cama, lo arropó y observó cómo al levantarse de su lado el pequeño se estiraba para ocupar el mayor espacio de cama posible. Lo miró desde el hogar y atizó el fuego, mientras llamaba a la doncella que dormía en la habitación continua. - Pide que me preparen un baño- la pidió en voz baja para no despertar al niño. Unos momentos de soledad no la vendrían nada mal, antes de que Olaft volviera a comportarse como un torbellino. - ¿Pido también que le suban los baúles con su ropa?- preguntó la joven. - ...