Isemay- Parte 22.13 VIVO
Durante los primeros minutos la oyó decir toda una sarta de improperios nada adecuados para una dama, finalmente empezó a maldecir el tener que quedarse con él allí, y cuando el peso de Osmar cayó sobre la cama, pareció quedarse sin aliento y un rato después se había quedado dormida. Osmar la miró mientras dormía relajada, con el pelo suelto que cubría parte de la almohada, se volvió hacía ella y la apartó un mechón que caía sobre su cara y le impedía verla por completo. Una de sus manos descansaba bajo su cara, mientras que la otra, colocada por encima de las mantas, hacía movimientos involuntarios sobre su estómago, el joven no pudo desviar la mirada de ese punto en concreto, tenía tantas ganas de hacer el amor con ella, que su excitación estaba dando paso a una imaginación calenturienta, estaba seguro de que algún día la pose...