Isemay- Parte 38.2 EXILIADO
Le tomó la cara entre las manos cuando llegó a su lado, y le secó las lágrimas, dándole un beso en cada mejilla, como si Olaft entendiera lo que había ocurrido, y que su madre estaba ahí para protegerle dejó de llorar, y la echo los brazos al cuello para abrazarla fuerte. La cadena que tenía al cuello deslumbró a Isemay, que la tomó entre sus manos mientras su hijo le miraba. - Vas a conocer a papa- Intentó que el comprendiera- y seguramente tu tío también esté allí, pórtate bien, ¿De acuerdo? Y no te separes de mama- el niño sonrió y echo a correr de nuevo al ver que la hija del rey pasaba de nuevo por su lado. Isemay le observó jugar, mientras continuaba oyendo el ruido de los baúles caer contra el carro, que la llevaría a la corte, había estado tant...