¿La amistad verdadera nace así?

Mañana terminan los centros abiertos, un día de fiesta para todos, en los que los padres podrán entrar al colegio para ver a sus hijos disfrazados. Pero eso ya os lo contaré mañana... Y colgaré como realizar el disfraz en mi blog, de "EL ARTE DE ENSEÑAR"

Hoy hemos ido a la piscina, y lo hemos pasado genial, ha ocurrido lo que no habíamos visto nunca, y es que después de recorrer todas las piscinas, mis peques han decidido, si ellos, no yo, porque era un día para disfrutar y tampoco quería llevarles la contraria.

Bueno, han decidido, que todas las piscinas estaban heladas excepto la pequeña, así que como si fuera una decisión unánime, todos se han metido juntos a la piscina pequeña, se han sentado en círculo en el suelo, mirándose unos a otros, y se han comenzado a echar agua, reían, gritaban ante el agua fría, y jugaban todos juntos.

A la salida del agua, una de mis niñas ha reconocido a su compañera por el nombre, diciéndome, ...(nombre de la compañera), me ha dicho Jesús, y yo no la entendía, y digo Jesús, ¿Quién es Jesús?. Ya he averiguado que lo que ocurría es que había estornudado y la otra compañera la había dicho Jesús, entre ellos ha nacido una amistad, por una simple palabra, ya que luego han estado juntas todo el tiempo.

Y es que la amistad nace cuando menos te lo esperas, y los niños, saben valorarla por cosas simples, por algo que se prestan entre ellos, por la ayuda que se dan si uno se cae, por la protección ante otros niños...  ¿Por qué no hacemos nosotros lo mismo?

Hoy he disfrutado mucho, les he visto jugar, reírse, y no porque nosotras interviniéramos, si no, porque ellos querían jugar juntos... A veces pienso, cuantas veces los adultos preferimos estar solos a compartir nuestras vidas con los amigos, solo por el hecho de que recibir cariño nos asusta, y dar cariño también, porque implica un compromiso.

Espero que mañana ocurra lo mismo.