Latidos- Capítulo 1.2
Una canción
comenzó a sonar, y una lágrima se deslizó por la mejilla de él, sabía que sería
el final, ella se lo había dicho muchas veces, que si él se lo pedía, ella
jamás volvería a molestarle, y él, acababa de tomar una decisión por los dos,
la había dicho que se marchara, que quería que fuera feliz, y al no verla
convencida de sus palabras, la dijo lo peor que podía decir.
—
No comprendes nada, ¿No es cierto? No te quiero,
nunca te he querido y este juego ha terminado, no veo motivos a seguir
tratándote bien, no veo porque hemos de seguir manteniendo un juego que yo se
como acabará, no te quiero cerca de mi vida, ¿Lo comprendes?
Y esas eran las
palabras que él sabía que habían sentenciado lo suyo, lo que pudo haber sido el
día en que la miró a los ojos, o la primera vez que entrelazó sus manos a las
de ella, sabía que había un futuro para ambos, pero él, ni lo quería, ni quería
verlo y era más fácil así, ¡Maldita cría que no comprendía nada!
Comentarios
Un abrazo, sigo vigilando
Besos.
Bueno no quería dejar pasar la ocasion de desearte unas felices fiestas y que el año que viene te depare muchos deseos cumplidos.
Cuidate pequeñaja, jejeje
unos besotesssssssssssssssss
Nos dejas un bonito relato que bien pudiera ser realidad.
Siento decirte, ¡y perdona mi reina! pero no pueda acetar tu propuesta y mira que lo siento de verdad.
A penas me queda tiempo para corresponder a las personas que pasan por mi blog.
Por otra parte, no me encuentro bien de salud, debo estar lo menos posible en el ordenador.
¿Me perdonas si? Mil gracias por acordarte de mí.
Te dejo un abrazo grande, con mis mejores deseos en estas fiestas navideñas y un muy próspero año nuevo.
Que todos tus sueños se vea realizados, Suerte mucha suerte Tamara.
Besos a puñados. MARINA.
Tamara, un abrazote y mi deseo de unos hermosos dias para ti y los tuyos