Una nueva vida- Capítulo 8.2
Una mañana le llegó una notificación a Mateo de una de sus haciendas:
“Querido Mateo, debido a la herida infringida a tu hijo y a su grave estado, no te he querido preocupar, pero necesito que venga usted a la hacienda, debemos echar cuentas y pensar como distribuir la mercancía.”
Mateo se lo había contado a José y le había pedido que le acompañara, este aceptó, y comenzaron a preparar el viaje, José había crecido y su padre no quería forzarle para que se casara, pero debía hacerlo, ya tenía veinticuatro años y debía trasladarse a una de sus haciendas y formar una familia, debía tomar el poder del heredero. Mateo se lo explicó a José y este, dando ya por muerta a su princesa, a la que después de un año no había encontrado, decidió comprometerse con su prima, con la cual iría a la Hacienda y se conocerían mejor.
Incluso podría hasta llegar a enamorarse de ella. Su prima era muy bella y como decía su padre, estaba hecha para criar y engendrar niños, sanos y fuertes y era lo prioritario para un heredero, tener muchos hijos varones.
Lidia, que así se llamaba su prima tenía el pelo rubio como los rayos del sol y una gran sonrisa inocente, aun era una niña, pero debían casarse, su padre le dio para ello el plazo de medio año.
Venus, Afrodis y los demás criados prepararon el viaje de su señor y de su hijo, por fin había llegado el día previsto, y los tres se marcharían a la hacienda, aunque Lidia pararía por el camino para comprar objetos necesarios para la boda, después, los novios debían estar solos, debían conocerse, ya que tenían que formar una familia.
Continuará...
Comentarios
Que mais irá acontecer?!
Isto promete!
Radians ainda vai sofrer mais um bocadinho!...
Parabéns, querida Está uma óptima narrativa.
Bom fim de semana.
Beijinhos
Beatriz
Bessos
Un beso