Una nueva vida 51
Durante todos esos meses, José había estado en la hacienda intentando olvidarse de la joven que le había robado el corazón y que había hecho él, llevársela al balcón, besarla y humillarla ante todo el mundo, aun no sabía ni porque lo había hecho y porque los celos podían con él de esa forma, aún no había anulado el compromiso con su hermano y se disponía hacerlo esa misma semana, a lo mejor así conseguiría olvidarla lo antes posible.
Había llegado a su casa y saludado a los criados y al mayordomo, había subido a su cuarto e intentado dormir, pero cada vez que cerraba los ojos, lo único que conseguía es que la imagen de esa mujer de pelo castaño, le enturbiara la mente y le excitaba y ya no podía controlar hasta que punto, recordaba las facciones de su piel, las suaves caricias y el amor que ambos parecían haberse tenido, ahora ella debía odiarle, pero al parecer, todo lo que había pasado meses antes se había olvidado ya que le volvían a invitar a las fiestas.
Comentarios
Tal vez José piensa de un modo diferente
Besos