Latidos- Capítulo 4
Capítulo 4
Ella había
entrado a ese camarote y habían surgido los reproches, las dudas, el adiós, y
el poder hacer lo que ella quisiera si él ya no estaba en su vida. Pero sin
saber como habían acabado en la cama, sintiéndose el uno del otro, amándose,
entregándose como nunca lo habían hecho.
Y
todo había derivado en el momento en el que estaban ahora, al salir del barco,
como enajenados por una locura de amor, se habían casado, en un ermita,
rodeados de la nada, solo el sacerdote, ellos y como testigos, dos mujeres que
se encontraban en la Iglesia en aquel momento. Para ser felices no necesitaban
nada más, ni al mundo, ni a nadie.
Pero
eso acabó en un mes, cuando él se arrepintió de estar así, cuando vió o sintió
que no tenía nada para ofrecerla, y ella se cansó de esperarle, se cansó de
tirar de él cada día, de intentar que fuera feliz, de que comprendiera que ella
le quería a él y no al dinero, a un trabajo, a nada.
Ella se cansó y
se marchó, cogió las maletas y desapareció de su vida.
Comentarios
Felices Fiestas profe.
Haga ud un Feliz Fin de Año y un inolvidable 2013
Sobre todo, No se Rinda
http://enfugayremolino.blogspot.com/
Besos.
Abrazos miles