Una nueva vida- Capítulo 24.5
Radians se despertó a la mañana siguiente, José había abierto la puerta y no estaba en la habitación, se asomó por la ventana y observó que hablaba con su padre que parecía reñirle, aunque después le abrazó. Radians se puso de pie y vió que Flor entraba al cuarto.
— Señorita Radians- la sonrió Flor- me alegro de que este bien y ya pueda levantarse
— Me puede ayudar a bañarme
— Por supuesto, tres semanas y usted no se ha lavado, llamaré enseguida a alguien para que traiga una tina con agua caliente
— Gracias
— Después la vestiré y la pondré un vestido precioso
— No lo dudo- la sonrió.
Al poco tiempo llegaron dos hombres con una tina y dos muchachas detrás con cubos de agua caliente, cuando salieron, Flor la ayudó a desvestirse y a meterse en la tina, después de tres semanas sin lavarse, la sentaba bien un bañó con agua caliente.
— Flor.
— Si, señora
— ¿Me puedes traer algo para rasurarme?
— Si, se me había olvidado- rió Flor- enseguida regreso- y la dejó sola
Cuando Flor regresó la entregó la navaja y la dejó sola en el cuarto. Radians se lavo el pelo, después el cuerpo y mientras apoyaba una pierna en el borde de la bañera se afeitaba.
José llegó a la habitación y miro a la mujer que se limpiaba con agua la pierna y cogía una navaja para rasurarse el pelo, cuando termino con esa pierna comenzó con la otra y José la observó sin hacer ruido, después ella se aclaró las piernas y el pelo y se levantó de la bañera despacio para no hacerse daño, el agua caía de su cuerpo como una cascada y por primera vez de espaldas su pelo la llegaba a la cintura. José se acercó a Radians y la cubrió con una toalla mientras la abrazaba por la espalda. Estaba excitado y deseaba tocarla, pero sabía que debía respetarla.
— ¿Te ayudo a salir?- la preguntó
— Te lo agradecería, no te he oído entrar.
Continuará...
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