Isemay- Parte 14.2 VIVO
Osmar se pasaba el día con el capitán del barco, durante los dos días siguientes a los que les recogieran de la mar, no habían visto absolutamente anda a causa de la niebla, así que se habían separado mucho de su ruta original, y ahora intentaban recalcularla. Isemay, se había hecho amiga de la mujer del capitán, y la ayudaba en la cocina cuando el resto de la tripulación estaba trabajando.
- Pensé que Lord Osmar, era su hermano mayor- sonrió la mujer inocentemente, pues sabía que no era apropiado hablar de los rumores delante de la interesada- mi esposo me dejó sorprendida cuando ayer me informó que se trata de su marido.
- La historia es muy larga- sonrió Isemay para sí, pero no levantó la cabeza para mirar a la mujer, aunque sabía muy bien que ella si le miraba, pues los golpes del cuchillo habían cesado.
- Debe ser muy triste no poder compartir habitación con él- siguió hablando- creí que envidiaba a la gente de vuestra clase- se interrumpió- querida, no quería ofenderte- la miró a los ojos al ver que Isemay si la miraba ahora.
- Yo tampoco nos envidiaría- bromeó ella a su vez.
- Querida, es que no comprendo como pueden casarse de esa manera- siguió hablando.
- ¿Cuál manera?- preguntó Isemay después de una pausa. Estaba acostumbrada a que todo el mundo opinara de su relación a sus espaldas, nadie había sido tan franco con ella en mucho tiempo.
- No pueden dormir juntos, por si la gente bromea sobre sus actos conyugales- se sonrojó la mujer- no deberíamos estar hablando de esto.
- No duermo con mi esposo, porque nuestro matrimonio fue concertado- la explicó- nada tiene que ver lo que digan los demás.
- ¿Quiere decir que no le ama?- se sobresaltó la anciana al oír sus propias palabras- oh, olvídelo querida- la dijo, pero paró de nuevo de cortar zanahorias y se la quedó mirando, esperando contestación.
- Creo que esta es la primera vez que paso verdadero tiempo con él desde que nos casaron- la explicó dando de comer a la curiosidad de la anciana- nuestras familias concertaron nuestros esponsales, él no me quería, yo era muy joven- la dijo cuando la observó ponerse pálida- Después de nuestros esponsales, yo tuve que ir a una escuela, y después conviví en casa de una anciana que me cuidaba, volví a verlo hace menos de dos semanas- concluyó la conversación.
Comentarios
un beso
Intentaré cogerte ya hoy, desde ahora. Grrr.
Malvada.
En fin, si alguna vez le odió sería por que lo amaba.
Que se prepare Osmar que ella le va a poner las pilas imagino...
No creo que hoy muchas mujeres dejaran a sus maridos con amantes delante de sus narices, tampoco dejarían que las desterraran de su hogar, ni que las forzaran a casarse, al menos no en España, y supongo que para la mujer del capitan, ver que ellos dormían en habitaciones separadas cuando normalmente los criados compartían cama el marido, la mujer y en algunas ocasiones hasta los hijos pequeños... Era extraño.
Tan cerca y dos mundos totalmente paralelos.
Intrigados seguimos...