Isemay- Parte 14.6 VIVO
Isemay se la quedó mirando, sin saber que hacer o que decir, después, se alejó de la escalera y se acercó al lado opuesto de la escalinata, desde donde se veía el mar, cogió aire para insuflarle a sus pulmones y sonrió para sí cuando los últimos rayos de sol tocaron su tez y comenzaron a secar su cabello.
- Estás preciosa- le habló su esposo tras ella y se colocó a su lado en la barandilla.
- Gracias- se sonrojó y le miró nerviosa.
Era la primera vez que él la decía un cumplido, y también que se acercaba a ella con intenciones de conversar. Ella se dio la vuelta entregándole al sol los cabellos aún húmedos y miró hacia el otro lado, donde los tripulantes trabajaban.
- ¿Queda mucho para llegar a tierra?- le preguntó al ver que él seguía a su lado y la miraba.
- Creo que hemos encontrado la dirección que tenemos que seguir, pero aún no es seguro- contestó y después guardó silencio esperando que ella continuara, al ver que no lo hacía, la preguntó- ¿Tienes ganas de llegar?
- Estoy bien, Doña Encarna es amable conmigo, y por primera vez en mucho tiempo tengo a mi hermano cerca todo lo que quiero.
- Supongo que lo estropeé todo- habló después de otro silencio.
- Ninguno de los dos quería casarse, por eso pediste la anulación, ¿No es cierto?- Supo a ciencia cierta de que estaba hablando, ella había deseado que se la concedieran, sabía que su esposo no había sido feliz desde que la tenía a su cargo, y ella podría volver a casa, si eso sucedía.
- No me la concedieron, como ya sabrás- contestó a la defensiva.
- ¿Qué harás conmigo cuando lleguemos?- le preguntó intrigada.
- Hablas de ti, como si fueras mi mercancía.
- Algo por el estilo- cerró los ojos conteniendo las lágrimas, hacía ya mucho tiempo que se había jurado no llorarle para que la dejara regresar a Sabell, pero tal vez debería hacer un intento para conseguir ser feliz.
- Nunca pensé en ti en esos términos- aclaró.
- Directamente no pensaste nunca en mí- le acusó ella y se volvió para marcharse al ver que Doña Encarna se dirigía a la escotilla de bajada.
- ¿Crees que podrías perdonarme?- la sujetó él de un brazo para que no se marchara.
- Si me estás preguntando, si creo que existe algún futuro entre nosotros, la respuesta es, que lo dudo- se soltó de su brazo y se alejó de allí- nos veremos en la cena- añadió antes de descender las escaleras.
Comentarios
Ahora le toca a él mover pieza y espero que sea un jaque porque como ella se enroque lo va a pasar mal.
Saludos Tamara.
Un beso.
No me seas sosa y hazme caso que si no, me encapricharé más y me vas a crear un trauma. Tú sabrás.
Eldan, si te enamoras de un chico durante toda tu vida, el pasa de ti, se casa contigo, y le eres indiferente, ya puede venir de rodillas, con piropos, cogiéndola de la coleta o lo que quiera, que no es no.
Lo del trauma es chantaje psicológico... Ante esas cosas hay que plantarse, si te quieren invitar a tomar algo, pues... Que lo hagan de otra manera, un poquito más original.
Por ejemplo:
"Ya que el nectar de la tierra no es como el del olimpo en el que sueles estar, ¿Puedo invitarte a una copa para ver si se le acerca?"
Hasta me quedó bonito y todo... jajaja.
Un beso.
Besitos en el alma
Scarlet2807
Sigo pensando que los hombres jamás nos comprenderán, cogiéndonos de la coleta... Madre mía ;)
Un beso.
En fins, que a lo que íbamos, de paso saludo a Scarlett :), que otra opción es tirarle un ladrillo, dejar tuerta a la chica (grandísima tradición en mi pueblo) y luego casarse con ella, lo que pasa es que si fallo, lo mismo me deja tuerto ella a mi.
En mi pueblo no existe el matrimonio por penalty, es el matrimonio por "mal de ojo".
Y eso de invitarrrrrr, yo me bajo del olimpo y de lo que seaaaaaaaaa, san miguel fresquita?
Saludando que es gerundio.
Bueno en relación a Isemay estoy con Daniel en que no ha dicho lo que sentía realmente, yo creo que esta despechada y su orgullo no la va a dejar tirar el matrimonio por la borda. Además creo que lo que de verdad va a hacer es darle una lección.
Todo se andará, al menos espero que no la coja de la coleta, jejejej
un besote
Jajaja, casi es preferible lo de la coleta, porque lo de dejarla tuerta... ¿En que pueblo vives? No quiero pensar como será lo demás, da miedo.
Jajaja, se supone que el piropo tenías que mandarlo tu, el mío era un ejemplo, pero bueno vale, te invito a la San Miguel, sin tirarme de la coleta y mucho menos dejarme tuerta, pero cuando me cuelgues otro capítulo de tu libro :P
Un beso.
Me alegro de que te divierta el relato, pero ten cuidado y no pases por el pueblo de Eldan, que lo mismo te deja tuerto sin querer, que ya pasamos de la coleta, al ladrillazo. Me estoy pensando el invitarle a la San Miguel por correo... Que peligro.
Un beso.
Tal vez la opción coletas-ladrillo no funcionen con Isemay, tiene pinta de ser durilla.
La opción regalo y poesía será efectiva tal vez por lo que veo.
Me arrimo lentamente a ella, le miro dulcemente a los ojos, pongo cara de Romeo y le digo:
No es verdad, Isemay de amor que en aquella apartada orilla (o como fuese eso)
Y antes que se ponga demasiado tontorrona, le doy el regalo que tenía entre manos.
Una rana Toro de medio kg.
Y le digo:
Así es como quedó la última chica que me rechazó, es que soy fan de Harry Potter, sabes?
Seguro que no se resiste...
Jajaja, ya te digo yo que si pones cara de Romeo y la dices esa poesía, más luego la rana, cae rendida a tus pies, no se si se desmayará, o se agachará para que la rana no la caiga encima, pero que cae rendida, seguro ;)
Un beso.
El Pakirrín tiene a su madre, yo tengo mis ranas y ladrillos, algún rebuzno y marchando.
Son cosas que pasan Profe, Isemay seguro lo entendería pero no sé si Osmar habrá llegado a mi nivel de "encanto" sin igual.
Ya lo veremos en los próximos capítulos.
Saludín :)
Cada hombre tiene su encanto, que por mucho Paquirrín y mucha Pantoja, como que paso... Prefiero los rebuznos si hace falta, hasta las ranas tienen su encanto.
Un beso.
Eso es "utocracia".
Ome, ande se ponga una rana y un rebuzno... faltaría más.
Saludicos :)
Estoy pensando que va a llamarse Bartolo, como tu gato, por eso de que los gatos cazan pajarillos, y se llevan mal con los perros, pero al parecer el tuyo estaba enamorado de Chispas, así que... ¿Por qué no enamorarse de un pájaro?
Un beso.
Esperando el capítulo me retiro un ratín a ver si sudo un poco, que estoy "en los huesos".
No hay sudor sin su recompensa :P
Tipica mediterránea creo jejeje.