Nostalgia por un atardecer
Hace unos días, fue mi cumpleaños, ya lo sabéis, y para realizar la entrada del blog, tuve que indagar, en fotos que hacía mucho tiempo que no veía. En algunas pensé, como pude guardar estas fotos : D, otras no me acordaba ni de cuando las había realizado.
Tuve gratas sorpresas, como encontrar fotos de los primeros bailes que hacía en el colegio, rodeada de mis amigos. También las fotos del primer día que pise un aula como maestra, del día de mi graduación, del nacimiento de mis primos... De esas, incluso hasta encontré algunos vídeos, que pienso enseñarles, para que vean, que alguna vez fueron bebes. Lo que hace tener una cámara digital donde poder fotografiar todos los momentos, que si sale mal, lo borras, y ya está, aunque sinceramente, soy de las que guardo todas, incluso las fotos borrosas.
Pero no iba a contaros sobre fotografía, si no que hoy en clase, me ha tocado vigilar el patio, y me he acordado de que mi primo, hace pocos días comenzó el colegio, entre llantos de pequeños, y gritos de los mayores que jugaban como locos por el recinto, he notado una manita en mi pierna, que me ha dado una sorpresa, pues como soy nueva, los peques suelen ir a quejarse a otros profesores.
Parecerá una tontería, pero que un niño, venga a contarme lo que le ocurre, para mí es una muestra de confianza, he bajado la vista y me he agachado a su altura, pienso que deben vernos como gigantes desde allí abajo, y más, cuando tienen un problema.
Así que, le he dado la mano y le he preguntado que le ocurría, el pequeño me miró como si sólo yo, pudiera solucionarle el gran dilema, y luego me dijo:
- ¿Y si no me acuerdo como te llamas?
Luego se ha acercado una compañera, que me ha preguntado si ocurría algo, y le he contestado que nada que un trato no pueda solucionar.
Esta tarde, he vuelto a revisar las fotos, y he encontrado estas, de hace unos años, cuando me mude de casa, ese día, estaba muy triste, dejaba una vida tras de mí, dejaba de vivir cerca de mi abuela (Para mí verla todos los días era importantísimo), dejaba de compartir espacio de juegos con mis primos, dejaba de ver a mis amigos... Y he pensado, que si ese día, alguien hubiera hecho un trato conmigo, diciéndome, que no pasaba nada, tal vez, no hubiera estado tan triste.
Os dejo las fotos que me han hecho recordar, supongo que, ver el proceso de un atardecer, no sólo me hace recordar a mí. Espero que os gusten, y os traigan buenos recuerdos.
Besos a todos.
Comentarios
Un beso.
Besos.
Ha estado guapo el comentario.
Saludosssss
Un beso.
Yo tambien soy profe...pero de un poco mas creciditos... de ciclos formativos.. no te digo mas! morir!
Se ve de todo... pero muy al contrario de lo que otros piensan.. a mi tambien me dan satisfacciones y eso, es de agradecer cuando te muestran cariño.
Reconozco que la anécdota del niñito es tiernisima... son tan bonitos...tan inocentes...
Te felicito por la entrada, y por tu cumple, aunque sea con un pelín de retraso...
Besitos mil.
Soy Ricard.
Sigo saliendo como anonimo.
Tratar con niños es lo mas enriquecedor que hay.
Verdaderamente toda una experiencia.
Has hecho un gran trabajo de recopilacion de imagenes y nos has mostrado tu lado mas tierno.
Preciosa foto de atardecer.
Un abrazo fuerte.
Ricard
Soy Ricard
Como ves, solo puedo comentar como anonimo.
Tratar con niños es lo mas enriquecedor que hay.
Verdaderamente toda una experiencia.
Has hecho un gran trabajo de recopilacion de imagenes y nos has mostrado tu lado mas tierno.
Preciosa foto de atardecer.
Un abrazo fuerte.
Ricard
un beso profe.
Normalmente doy hasta los 12 años, pero como soy de Educación Especial, puedo dar a todas las edades, en verano, y el primer año que trabaje, daba clase a los de 21 años, y bueno me encanta, pero es más cansado.
Un beso y me alegro de que te haya gustado.
A mi la verdad que tratar con niños me trae mucha satisfacción, y no se los demás, pero como yo soy dada a analizar las conductas, me pregunto porque en ese preciso instante se acercaron a mí y no a otra profe... Esas cosas. Será que me paso el día intentando averiguar que sienten sin que me digan nada.
Me alegro de que te haya gustado la foto, la verdad, son de hace tanto tiempo, que no sabía ni como iban a verse en la web.
Un beso.
Me alegro de que te hayan gustado las fotos, los vídeos no tienen mucha calidad, y solo pueden verse en el móvil, pero eran tan canijos cuando les grabe jajaja. Me encanta ver ese tipo de imágenes después de tanto tiempo.
Un besazo.
¿Sabes Tamara? me gusta mucho leerte, esos relatos intimistas que son parte de ti y que reflejan una gran dulzura, definitivamente ¡me gusta!
Besitos en el alma
Scarlet2807
Pues sí, las fotos están muy bien, y el relato van acorde a las fotos, y es que los niños son un mar de dudas, jajaja... yo de niño tambiñen tenía esa preocupación, pero fui demasiado tímido como para hablar así con mi profe, además de que era guapetona y bueno, cuando tienes 5 años, no entiendes de mucho...
Así que terminé por no llamarla nunca por su nombre... lo que no recuerdo es como la terminé llamando, aunque seguramente de ninguna manera, pues por no preguntar siempre decía que no tenía dudas.
Ten en cuenta que algunos alumnos te verán así, jejeje...
Besos!!
un beso
Besos.
Muy buena tu explicación de cuando eras peque, supongo que en algún momento todos pensamos así, yo nunca dude en llamarles profe, sería por la confianza, mi primera profe me tuvo en brazos, todo el primer año de colegio, no me gustaba nada eso de ir al cole y que mi hermana se quedara en casa con mi madre.
En cuanto a lo de las dudas, soy muy dada a "perder tiempo" repasando lo del día anterior, a lo mejor, luego les meto más caña para que hagan los ejercicios rápido, pero lo que tengo claro es que cuando se van a casa no tienen dudas y se lo saben todo, además de que, bueno, me gusta que sean ellos los que hagan de profes para sus compañeros, y al principio les da vergüenza, pero luego, pan comido.
Aún así, seguramente siempre haya alguno que me vea como tu veías a tu profe, pero ella debió darse cuenta, o a lo mejor es que era verdad que lo sabías todo ;)
Un beso.
Mmmm, quien sabe la de vueltas que te hubiera dado la vida de haberte marchado, lo mismo ahora mismo, tendrías unos pequeños giris por el mundo, no sé, yo no me arrepiento de la decisión que tomé, pero entiendo que a mis padres, amigos, novio,... Les resultara un poco raro, pero esta claro, que mi madre puso la norma, y yo la cumplí, tenía que dejarme.
Besos.