Una nueva vida- Capítulo 45.5

"El amor puede inspirar lo mejor y lo peor de las personas"

Roller, estuvo hablando largo rato con Mateo y José, Radians los miraba desde lejos, mientras que cogida del brazo de Alejandro de Medin, saludaba a los presentes en el salón, aunque miraba a su hermano de reojo, de vez en cuando.

Habló con Lorena, que sabía que debía sentirse incomoda, pero a esta no le importó la presencia de sus parientes, Eduardo estaba con ella para tranquilizarla.

Una hora más tarde Roller, mandó pasar a los invitados al salón donde los criados los fueron acomodando, como correspondía al rango. Roller se acercó a su hermana y la cogió del brazo cuando esta se dirigía a sentarse con sus amigos y con sus padres.

— Te corresponde estar a mi lado- la habló- con los duques y las duquesas, además, a tu lado se sentara el duque de Flexet y su primogénito, en frente de ti, me sentaré yo

— Preferiría sentarme con...

— Hermana, eres hija de duques y tienes que sentarte donde te corresponde.

— Está bien- hizo caso a su hermano, al fin y al cabo ella debía tener el lugar que la correspondía- lo más seguro es que me retire pronto, me encuentro muy agotada- habló a su hermano

— ¿Te ocurre algo?, ¿necesitas que llame al médico?

— No, de verdad, no me ocurre nada, solo es cansancio, el día fue muy duro, ¿no crees?

Roller la acompañó hasta su asiento, aunque tardaron varios minutos en llegar, ya que la gente los paraba por las mesas y les decía lo maravillosa que estaba la velada, lo bien decorado que estaba todo y elogiaban a Radians.

Cuando por fin llegaron a la mesa y Roller la ayudó a sentarse, José y su padre ya estaban allí, pero ambos hablaban con las acompañantes que tenían al otro lado, Radians se sentó y observó como Alejandro de Medin se sentaba enfrente de la dama que tenía al otro lado José, por lo menos le tendría cerca, este vio que le miraba y la sonrió con una muestra de afecto ya que eran grandes amigos.

— Madame- la habló mientras se sentaba- está usted muy bien acompañada- fue entonces cuando José volvió su cabeza y la vio sentada a su lado

— Si- le contestó Radians a Alejandro- estoy bien acompañada en cualquier lugar que este usted- le dijo al hombre con el que mantenía una relación de amistad, ya que pretendía a Melisa

— Madame, en verdad es usted tan amable, parece que si usted está conmigo el mismo infierno parecería el cielo

— Así es exactamente- le sonrió

— Yo creo que es totalmente al revés- interrumpió José la conversación ante la mirada crítica de su padre

— ¿Cómo dice?- pregunto Alejandro

— Usted se siente en el cielo cuando ella está a su lado- le dijo un poco airado ante las confianzas que ese hombre se tomaba con Radians

— Tiene usted razón- le dijo Eduardo- pero, dígame, ¿no es ella lo suficientemente bella como para que se olviden las reglas del decoro?

— Con más razón, no debería usted olvidarlas- le dijo José

— Un caballero las olvidó hace meses conmigo- le dijo Radians en bajo para que solo José pudiera oírlo