Puede pasar, toma la decisión adecuada (PARTE 11 y ÚLTIMA)
Volví a entrar en la ambulancia, había bajado para que terminara de tranquilizarme en lo que el médico miraba a mi padre, hablara con los policías, etc.
El médico me dijo que había sobrevivido gracias al casco, ya que había caído de cabeza golpeándome contra el bordillo, me dijo también que mi padre estaba bien, solo tenía heridas en uno de los brazos, debido a que se arañó contra el asfalto, y una de las piernas.
El médico me dijo que había sobrevivido gracias al casco, ya que había caído de cabeza golpeándome contra el bordillo, me dijo también que mi padre estaba bien, solo tenía heridas en uno de los brazos, debido a que se arañó contra el asfalto, y una de las piernas.
Me curó la mano, que yo ni siquiera había notado que me sangraba y no me la pudieron vendar, a causa de que la herida necesitaba curas, pero me había roto un hueso de la muñeca. Cuando terminaron las curas, tuve que llevar durante mucho tiempo una muñequera que me cogía también la mano para tenerla sujeta, y estuvieron estudiando si debían operarme, pero al final, todo se quedo en eso, estudios.
Aun así, ahora, para hacer fuerza con las manos, por ejemplo, cuando estoy trabajando en el cole, y tengo que atender alguna crisis, normalmente siempre llevo la muñequera puesta, ya que empiezo a notar que me duele o se me abre muy a menudo.
Aun así, ahora, para hacer fuerza con las manos, por ejemplo, cuando estoy trabajando en el cole, y tengo que atender alguna crisis, normalmente siempre llevo la muñequera puesta, ya que empiezo a notar que me duele o se me abre muy a menudo.
Me dijo también que los pantalones vaqueros eran buenos para ir en moto, evitaron que me quemara las piernas en el arrastre, yo ni siquiera sabía que me había arrastrado por el suelo, y también que mis botas habían salvado mis piernas, las botas aun las conservo, los pantalones estaban inutilizables. Las cicatrices de mi pierna, ya casi no son visibles, bueno, siempre me dicen que yo las noto porque sé donde están, pero si yo las veo, ya es suficiente. Al salir volando de la moto, me golpeé la pierna con el coche, justo debajo de la rodilla, por eso salí impulsada hacia arriba.
Después de estar llena de heridas, donde por suerte tuve gente a mi lado que me hacía las curas, ya que yo me negaba a mirarme. Un mes már tarde, cuando me colocaron la muñequera, y consiguieron, vendarme la pierna derecha porque ya las heridas se habían curado, comencé a ir a rehabilitación.
Me llevaban mis padres, hasta la empresa donde trabajaba, ya que lo tomaron como accidente laboral, al haber sido saliendo del trabajo, bueno eso, y que uno de mis jefes, lo vio todo.
Me llevaban mis padres, hasta la empresa donde trabajaba, ya que lo tomaron como accidente laboral, al haber sido saliendo del trabajo, bueno eso, y que uno de mis jefes, lo vio todo.
Lo que sentí durante ese mes, sintiendo que mi pierna no respondía cuando la tocaban y que no tenía sensibilidad, me lo guardaré para mí, porque era algo que no podía controlar, después, simplemente uno se acostumbra, igual que a lo de la muñeca.
Un mes más tarde, a riesgo de desesperarme si no hacía algo, fui a rehabilitación en el trabajo y me dí el alta voluntaria, ... Necesitaba entretenerme con algo, necesitaba evitar pensar en lo que aún me quedaba para recuperar la sensibilidad de mi pierna, y para la recuperación de mi muñeca.
Y he de decir, que tuve unos compañeros magníficos, que me ayudaban en todo, que se tomaban con mucha calma que no pudiera estar subiendo y bajando, ni saltando al suelo, ni siquiera, que pudiera cargar con todas las maquinas, que antes del accidente si cargaba.
Gracias al trabajo, creo que la rehabilitación se hizo más rápida, allí no me quedaba otra que moverme de un lado a otro, y aunque al principio me costó muchas lágrimas, soy de las que piensan, que no hay que rendirse nunca mientras existan esperanzas.
Y he de decir, que tuve unos compañeros magníficos, que me ayudaban en todo, que se tomaban con mucha calma que no pudiera estar subiendo y bajando, ni saltando al suelo, ni siquiera, que pudiera cargar con todas las maquinas, que antes del accidente si cargaba.
Gracias al trabajo, creo que la rehabilitación se hizo más rápida, allí no me quedaba otra que moverme de un lado a otro, y aunque al principio me costó muchas lágrimas, soy de las que piensan, que no hay que rendirse nunca mientras existan esperanzas.
Espero que entendáis porque escribí esto, no es para contaros una experiencia, es para explicaros la importancia de llevar un casco puesto, podía haber muerto ese día, y estoy aquí.
Tuve que tomar una decisión importante, y tomé la adecuada, sinceramente, espero que vosotros también hagáis lo mismo, yo también era de las que pensaban que un accidente así jamás me pasaría a mí, pero me paso, y puede pasar en cualquier momento, incluso a dos calles de tu casa.
GRACIAS POR LEERME
Comentarios
Me alegro por ti y tu fortaleza.
Me siento orgulloso de la única profe que me entiende un poco.
saludos.
Un abrazo
Sobre tu experiencia, tu mejor consejo, en eso tienes razón. Ha sido un placer leer tu rticulo entero, en serio. y ahora..... a por lo siguiente, ejejje
un abrazo, mi niña
Yo también espero que sirva, porque no me gustaría haberlo escrito en balde, aunque sé que no todo el mundo escuchará.
Jajaja, ¿Soy la única profe que te entiende? Si te estás planteando volver a la escuela... Ya te digo que al menos este curso, doy clase en infantil ;) Pero eres bien recibido siempre.
Lo que pasa, que te iba a poner a inventar cuentos... No me da tiempo a tener tanta imaginación ;) Seguro que dos cabezas piensan más que una, y poco te iba a enseñar yo a ti.
Vamos que si quieres comenzar a inventar cuentos para niños, yo encantada :P Lo que pasa con la confianza, ya sabes, que da asco.
Un beso enorme.
Y gracias por decirme que hago bien en contarlo, esperemos que le sirva a alguien.
Besos.
La pierna, se recuperará del todo, ya ves, soy muy cabezota. Y la muñeca, bueno, es algo que no se quita, cuando se te rompe un hueso se queda débil, pero es cuestión de tener cuidado. Cuando sé que voy a tener que hacer algo que me haga daño, me pongo la muñequera y listo, pero vamos, que cada vez me la pongo menos.
Las comeduras de cabeza... fff, eso eran lo peor, y más que eso, lo que me provocaba verme la pierna así, la muñeca solo era preocupación por si tenían que operarme, pero la pierna... En fín, espero poder algún día dejar de decir, la pierna mala.
Gracias a vosotros por seguir leyéndome. Hay experiencias que es mejor que te las cuenten ;)
Besos.
Me alegra saber que la recuperación avanza bien y que quedará casi en un mal recuerdo.
Un abrazo
Un beso.
Un beso, ¡FELICIDADES! y feliz fin de semana.
Buen fín de semana a ti también. Un besazo.