Isemay- Parte 26.1 MUERTO



Otro cañonazo, y el barco se balanceó hacia uno de los lados, perdió el equilibrio, intentó agarrarse al poste de la cama pero no lo consiguió y cayó al suelo. Se golpeó la cabeza con uno de los baúles, y un gran dolor la nubló la vista, levantó la mano para tocarse el lugar donde se había golpeado, pero la visión no la dejaba distinguir los contornos de sus propios dedos.
-                             ¡El otro barco esta muy cerca!- oyó gritar al otro lado de la puerta.
Todo estaba tan oscuro, la lámpara de aceite había caído al suelo y el vaso de agua que estaba en su mesilla se había derramado sobre ella, aunque quisiera no podría encenderla. Sintió por un momento que todo era de color negro.
Intentó mantener la conciencia despierta, no podía desmayarse ahora, pero el sueño parecía que no la dejaría elegir. Su último movimiento fue el de agarrarse el vientre, protegiendo al bebe de todo lo que pudiera venir de fuera. Ya antes la habían golpeado y el vientre sería uno de los primeros lugares donde la pegarían, varias veces la habían explicado ya, que no podían desaprovechar su cara.
Para sus adentros, maldijo en silencio ser hermosa, y parecerse a su madre. Cerró los ojos con fuerza cuando las nauseas se agolparon en su garganta.
Instantes después, unos fuertes brazos tiraron de ella hacia arriba y la zarandearon para hacerla volver en sí. Poco a poco abrió los ojos, y vio a Wilde frente a ella, con varios escoltas. Parpadeó para enfocar su imagen, parecía enfadado. Se agachó el tiempo justo para colocarla la daga en la cintura de la bata y sujetarla bien.
-                             Nos atacan- la dijo- asegúrate de no perder esto, sino quieres que te violen.
-                             Lo sé- consiguió articular, mientras intentaba mantenerse en pie.
El camarote pareció reducir de tamaño por momentos, y mientras intentaba controlar las ganas de vomitar, consiguió mantenerse lo bastante erguida como para mirar a su prometido a los ojos mientras la hablaba. Intentó en vano escuchar sus palabras, pero el eco de su voz parecía no querer entrar en su mente.
-                             ¿Te has enterado?- escuchó por fín, y ella asintió no sabiendo que le había dicho durante toda aquella cháchara.

Comentarios

EldanYdalmaden ha dicho que…
Madre mía, qué brutos, anda que no tenían ganas de violar a la gente por esos lares.
Y después de todo, ¿no había querido el tal Wilde violarla o casi antes?
Obligar a alguien a que se case o haga algo en contra de su voluntad...... este Wilde.....

Saludos.
Tamara ha dicho que…
Ya ves Dany, eran bárbaros sin civilizar, pensaban que lo que encontraban era suyo, aunque fuera la vida de una persona.

Si, pero claro, Wilde, es Wilde, ahora no quiere que nadie toque a su prometida, a lo mejor en el fondo se preocupa por ella, ¿Terminará siendo bueno?

Un besazo.

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