Isemay- Parte 32.4 MUERTO

           
A cualquiera le podía extrañar el trato que ellos se prodigaban, pero Patrick tenía su edad, era el mejor amigo de Reinald y desde pequeños los tres siempre habían estado juntos, era el mejor amigo que había tenido. Estaba segura de que podía haberle reconocido en cualquier parte de no haber estado tan nerviosa por su inminente boda con Wilde.
Isemay sonrió al recordarlo, seguramente Patrick era el único hombre además de su hermano y Reinald que la habían visto desnuda cuando era pequeña. Su primo tenía plena confianza en que ellos se enamoraran y se casaran, le hubiera encantado tener a Patrick en la familia, y seguramente hubiera sido un marido estupendo para ella. Todo había cambiado entre ellos cuando ella se enamoró de Osmar, dejando de lado a sus amigos y convirtiéndose en mayor antes de tiempo. Y después de su boda, el contacto entre ellos había terminado.
-                             ¿Él está bien?- se dirigió por primera vez a su esposo.
Osmar sabía lo que Patrick había sido para ella en un pasado, pero jamás le había tenido celos, sabía que ella hubiera podido estar con él si hubiera querido, pero el amor que ella le prodigaba era diferente al que tienen dos enamorados. Su preocupación no era fruto de la pasión, ni del enamoramiento, sino de un sentimiento de hermanos.
-                             Se recuperará.
-                             Tenía tanta sangre- recordó el momento en que ella le apretó la herida con su mano, y pensó que la vida de su amigo se iría entre sus dedos.
-                             A veces la sangre es demasiado escandalosa. Solo era eso, sangre, la herida no era demasiado profunda- la sintió tambalearse a su lado y como un instinto protector la tomó de la cintura- ¿Te encuentras mal? ¿Estas enferma?
-                             Tranquilo- le miró a los ojos- solo recordé algo desagradable, a veces preferiría no pensar en esas cosas, no haber vivido esos momentos, pero no puedo olvidarlos, no puedo dormir, me despierto sobresaltada, y en mis sueños veo a Olaft lejos de mi, que no puedo llegar a él, que alguien lo…
-                             Hubiera deseado que jamás vieras una batalla. Nadie, escúchame bien- dijo tomándola de la barbilla para que lo mirara a los ojos- jamás van a hacer daño a nuestro hijo, eso te lo prometo.

Comentarios

EldanYdalmaden ha dicho que…
Pufff, es que a mí eso de las promesas.... por prometer no tiene por qué cumplirse, es quedar bien en el momento pero decir que nadie le va a hacer daño.... es relativo.
perdón por el rollo profe, estoy en plan filosófico


muas
Tamara ha dicho que…
Hay quien promete de verdad Dany, yo solo prometer las cosas que pienso cumplir.

Un besazo y nada de perdones, que aquí puedes hablar cuanto gustes.

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