Isemay- Parte 38.5 EXILIADO
- ¿Sigues pensativa?- la abrazó Reynald por la espalda, y cruzó sus brazos sobre su estómago.
- No quiero ir allí, pero es el único modo.
- Yo podía haber llevado a Olaft para que Osmar le conociera, puedes regresar a casa, no dejaría que nadie hiciera daño a tu hijo.
- Olaft no conoce a su padre, y me necesitará a su lado, además, ahora que Osmar ha regresado no puedo permanecer escondida todo el día, no quiero que mi hijo no pueda viajar y disfrutar de la vida con su madre. Mira que bien se lleva con sus primos- le dijo al ver como la hija del rey lo cogía en brazos- no puedo negarle eso.
- Yo lo sé, pero también que es duro para ti.
- He tenido dos años para prepararme, debería haberme acostumbrado.
- El amor no es tan…
- No digas eso- le interrumpió- yo no amo a Osmar, él se llevó el amor que yo tenía con él.
- Está bien- se separó de ella- Debemos seguir el camino, pararemos esta noche, os he dejado una cesta en el carruaje, por si Olaft tiene hambre.
- Seguro que lo tendrá, pero ahora dormirá la siesta un rato, sino esta noche estará insoportable.
- ¿Sabes que me tendrás para siempre, verdad? Jamás os dejaré solos.
- Lo sé- le acarició la mejilla- eres una parte muy importante de mi vida.
- Sube al carruaje, mientras busco al niño, nos espera una larga tarde.
Comentarios
Me lo creo?
Saludos profeeeee
Besotessssssssssssssssssss
Un besazo.
Un besazo.