Almadén- Puerto Palacios


El fín de semana del cumpleaños de Dany me decidí a ir a verle y pasar unos días entretenida con los amigos, una de las tardes y para no trastocar mucho los planes del cumpleañero, decidimos ir de ruta a Puerto Palacios, allí, Dany y sus amigos van casi todas las tardes, las vistas son geniales, pero os aseguro que la caminata no lo es tanto, la ida es todo cuesta arriba, que si, que muy bonita, pero cuando ya había andado un buen rato estaba hasta las narices de la cuestecita, y ellos tan campantes, reían, hablaban y comían por el camino de los árboles que iban encontrando, yo, sin embargo, estaba al principio congelada, luego sudando, y por si fuera poco más tarde estaba asfixiándome con la cuestecita.

Al llegar arriba nos paramos para descansar, yo se que más por mí que por ellos, aunque hay que decir que todos nos sentamos menos uno, que se fue por ahí a ver otros caminos, para cuando regresó, yo ya me había bebido mi botella de agua entera y la piedra donde estaba sentaba había vuelto a absorber todo mi calor.

La vuelta fue más fácil, era todo cuesta abajo, todo excepto un trozo que por un momento y entre bromas les dije que iban a tener que subirme en brazos.


Pero quitando venturas y desventuras del viaje me lo pasé muy bien y aprendí cosas divertidísimas, como que de los madroños solo te puedes comer dos o tres porque puede que te entre un colocón, y es que ir a Almadén os aseguro que es vivir en plena naturaleza.


Bueno, cuando llegamos a dejar al primero del camino, decidimos ir a tomar un café, donde otra cosa no, pero la cantidad de cosas que sabe esta gente sobre pájaros, ¿os podéis creer que uno de ellos tiene más de cincuenta pájaros en su casa? Yo no la verdad, porque con el que tenía mi abuela nos sobraba y nos bastaba, que dolor de cabeza me ponía a todas horas ya que no paraba de cantar, así que os podéis imaginar lo que aluciné al saber eso.

Después del café, quedamos en vernos por la noche para ir a celebrar el cumple de Dany, se supone que para tomarnos algo, pero nada, que íbamos a volver para la cena, la cena se alargó y acabamos volviendo al día siguiente entre risas y buen humor, algunos bailes, y un recorrido por las zonas de fiesta del pueblo.

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Un besazo.





Comentarios

Mela ha dicho que…
Hola Tamara... me parece que tendrás que ir más a menudo para acostumbrarte a la cuestecita ;-)
Por lo que cuentas, creo que lo pasasteis genial y eso es lo que importa
50 pájaros en una casa, ¿no sería una pajarería? ;-)
Por supuesto, felicidades al cumpleañero
Besos
Jorge Donato ha dicho que…
Hola Tamara, veo que disfrutaste de lo lindo con Dani en Almaden. Me alegro por ello. Rodearse de naturaleza ayuda a desconectar del follón diario de la ciudad.
Un abrazo.
Marian ha dicho que…
Preciosa entrada mi niña. Ya ves, no se puede vivir en la capital, luego te ponen un monte por delante y no puedes con tus huesos. eso me pasa a mi cuando voy a mi tierra, pero lo consigo el llegar hasta arriba
Me encanta que lo pasarais tan bien. Felicita a Dany de mi parte aunque sea con retraso
besitos
J.P. Alexander ha dicho que…
Lindas imagenes, te me cuidas Tamara
Beatriz Bragança ha dicho que…
Hola,Tamara
Estás a precisar de fazer um pouco de exercício! Caminar faz bem!
Gostei muito das fotos e da tua crónica.
Um beijinho
Beatriz
Unknown ha dicho que…
Muchas gracias a todos... Un besazo.

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